Era el día de San Valentín y Brooklyn Chase estaba sorprendida con tanto globo y tanto corazoncito. La verdad es que su chico se lo había currado y al final, ambos decidieron compartir el mismo regalo: un buen polvo casero. La tetona se lo pasó en grande y se entregó a fondo para demostrarle lo mucho que le gusta, abriéndose de piernas y dejándole penetrarla como un animal y hasta correrse sobre ella.