Desde el divorcio, esta cuarentona no ha sido tan feliz, ya que ahora ha rehecho su vida con un hombre joven y guapo, que cubre todas sus necesidades. Ella ahora está disfrutando como nunca y lo demuestra al llevarle el desayuno a la cama, donde tienen un momento muy romántico. Pero no solo se quedan en besitos, sino que tras el calentón, acaban sin ropa y comenzando el día follando juntos como animales.