Parece que la amiga de Emily Addison quiere pasar un buen rato de sexo lésbico y como sabe que a la rubia le encanta comerse un buen coño, decide invitarla a su casa. Cuando la recibe, observa el vestido de colegiala que lleva puesto y que sin duda realza su increíble cuerpazo, algo que pronto la pone a tono. Las dos chicas se fueron a la cama enseguida y al final, no tardaron en quitarse las bragas para saborear sus chochitos entre las sábanas.