Para bajar unos kilitos, esta gorda pelirroja decidió salir de caminata con su novio y disfrutar del aire puro que da la naturaleza. Los dos se propusieron sudar un poco durante un buen rato, pero tras unos minutos caminando hicieron un alto. En ese momento, la gordita aprovechó para bajarse los pantalones y mostrarle sus nalgas, una imagen que se la puso dura como una piedra a su chico. Fue entonces cuando a los dos se les ocurrió marcarse un buen polvo al aire libre, con el que sin duda quemaron calorías.