Era el cumpleaños de su chico y como buena y atenta novia que es, le regaló una tarta y se la llevó a la cama. Pero no fue lo único que le dio ese día, ya que para celebrarlo, apareció en lencería y dispuesta a darle sexo anal toda la mañana. No suele dejarse encular, pero como era una ocasión especial, la muy golfa preparó su culo y le dejó penetrarlo como un animal a cuatro patas en la cama.