Mientras paseaba con su coche, este tipo vio en la calle a una milf gordita y se imaginó a si mismo dándole duro en una cama. Se acercó a ella y flirtearon un poco, hasta que finalmente la convenció para irse con él a su casa y pasar un buen rato. Y es que la señora lleva tiempo sin sexo, ya que su marido apenas la toca, así que piensa dejar que este tipo le folle el coño a conciencia, para poder así revivir sus mejores momentos de juventud con un polvazo.