Como no sabían muy bien que hacer, este grupo de amigos organizó una quedada para disfrutar juntos de un juego de mesa. Mientras preparaban la partida, iban bebiendo y tomando aperitivos hasta que las risas y el alcohol empezaron a hacer efecto. Solo hacía falta que alguien diese el paso y cuando eso ocurrió, olvidaron la partida y terminaron en pelotas follando todos juntos, en una orgía casera donde nadie se quedó sin su ración de sexo.