Aunque tiene cara de chica inocente, esta pelirroja tatuada es una auténtica fiera en la cama. Por eso, decide aprovecharlo para ganarse un buen dinero al mes, acudiendo a un casting donde tuvo que demostrar lo buena folladora que dice ser. Sin duda así lo hace, abriéndose de piernas para ese semental, que le da duro a su coño blanquito hasta terminar la escena llenando su cara llena de pecas con su lefa.