Se nota que esta guapa rusa quiere formar parte del mundo de la pornografía. No hay más que ver la sonrisa con la que acude a este casting, dispuesta a todo. De hecho, tras juguetear con el consolador, se pone manos a la obra con este chico y al poco rato, ya está pidiéndole sexo anal, algo que el chaval le da encantado de la vida.