Es normal que con ese par de ubres que tiene, esta rubia se lleve las miradas de los chicos siempre que sale a la calle. Sobre todo cuando se pone escotazos, con los que luce aun mejor su delantera. Sabe muy bien que son enormes y por eso, aprovecha el morbo que transmite para participar en un casting e intentar triunfar en el porno, gracias a este polvazo en el que disfruta y en el que vemos en plenitud sus tremendas tetazas.